Hospes Amérigo

El hotel boutique Amérigo es el resultado de una ambiciosa restauración. Dada la preciosa fachada de un convento dominico que había por aquí, varias cosas podrían haber salido mal. Cuando los proyectistas y delineantes se pusieron a trabajar, se encontraron con el armazón exterior de un edificio y la responsabilidad de recrear el interior, dejando intacta la mayor parte de la fachada posible. Las fotografías cuentan la historia: un magníficamente conservado frontispicio con la mampostería original, resaltando grandes ventanales góticos. A menudo el interés por crear un soberbio espacio interior puede llevar a un diseño excesivo con el resultado de una estructura similar a un enorme granero que deshumaniza el conjunto. Las directrices desde el principio fueron las de crear una serie de espacios en el Amérigo – una colección de zonas que dieran la sensación de una casa grande pero íntima. Lo consiguieron y el Amérigo es un precioso hotel con una gran ubicación. Algunas partes de Alicante fuera del centro histórico no han sido tratadas con el respeto que se merecen; pero las calles que rodean el Amérigo son como si de una ciudad totalmente distinta se tratara y, aunque es normal que los barrios antiguos escondan algunas de las joyas más tradicionales, Alicante lo hace muy bien en lo que respecta a ese manojo de callejuelas por las que deambular por la tarde y tomar el aire en un barrio de lo más auténtico. Además, tenemos la ventaja de que el hotel está a tiro de piedra del paseo marítimo – aunque siempre tenemos la opción de la terraza en la azotea del hotel, con piscina, bar y tumbonas y vistas de todo el casco antiguo. Por favor tome nota de que durante la Temporada Extra (Semana Santa y Mayo) el hotel se reserva el derecho de solicitar el depósito de una noche al efectuar la reserva.