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Si España tenía algo parecido al lejano oeste americano debe haber sido Extremadura, la tierra más allá del río Duero, y la zona que dio a luz a tantos conquistadores valientes.
La ciudad de Cáceres fue declarada patrimonio de la humanidad en 1985. Sobria, señorial y orgullosa, se encuentra en el corazón de esta tierra de conquistadores y es uno de los mejores ejemplos medievales y renacentistas del mundo. Está bendecido con un laberinto de calles y plazas medievales, además de hermosas iglesias, conventos y palacios de ensueño. De estilo medieval casi en su totalidad, las paredes de la ciudad perduran desde la época de los almohades e incluso conservan algunas secciones romanas. Además, doce de las treinta torres que una vez protegieron el recinto aún están en pie.
Trujillo es una de las ciudades más atractivas de Extremadura y gran parte está intacta desde el siglo XVI. Esta es la tierra de Francisco Pizarro, quien conquistó Perú y Orellana y quien descubrió el Amazonas. Por otro lado, Coria es una ciudad rodeada por sólidas murallas romanas, con un interesante castillo y una bonita catedral que se acerca desde el norte. Esta ciudad se encuentra en una rica llanura fértil en medio de plantaciones de tabaco y algodón.
Plasencia se sitúa  a orillas del Jerte. Esta es otra ciudad de edificios monumentales que recuerda a la grandeza del pasado, con pequeñas calles pintorescas, palacios aristocráticos, dos catedrales y un museo de caza. El cercano Monasterio de Yuste es un lugar que no te puedes perder; fue el último hogar del emperador Carlos I de España y sorprende por su austeridad.

Extremadura destaca por la extraordinaria calidad de su materia prima. Basada en una cocina sencilla, encontramos derivados del cerdo ibérico, cordero, deliciosos quesos, aceite de oliva, miel y vino, entre otros manjares.
No podrás irte de Extremadura sin probar el que es quizás el plato más famoso de España: el jamón ibérico de Bellota D.O. Dehesa de Extremadura. El pimentón de la Vera es una referencia en cuanto al pimentón que se usa en todo el mundo, con una calidad y aroma muy característico. Si te gusta el queso, tienes que saborear los deliciosos quesos del Casar y de La Serena. Por supuesto, el gazpacho, otra joya de la gastronomía de España, y las migas Extremeñas son también altamente recomendables.
Y si eres goloso, Extremadura posee riquísimos postres tales como las perrunillas, la tarta Técula Mécula originaria de Badajoz,  o los mantecados y flores extremeñas.