Cuando llegamos a Tenerife, nos sorprende su naturaleza tropical que crece y aropa el volcán, la humedad del aire, el fuerte aroma a madera y su salado mar atlantico. La isla parece estar dividida en dos, el Norte y Sur, que son completamente diferente, siendo el Norte mucho más verde y con playas de arena negra. Aquí se encuentran la mayoría de nuestros alojamientos con encanto. Algunos de ellos los hemos clasificado por temas, en esta lista están los más relevantes.

• Alojamientos rurales únicos en el campo
• Casas y villas con encanto en Tenerife
• Nidos de amor para escapadas románticas en Tenerife
• Hoteles en pueblos con encanto
• Lujosos hoteles boutique cerca del mar
• Alojamientos económicos para todos los bolsillos en Tenerife

Empecemos por el Norte de Tenerife: es un lugar de increíble diversidad y riqueza cultural, desde la impresionante arquitectura de las ciudades históricas hasta los hermosos acantilados escarpados y las calas rocosas que se sumergen en las resplandecientes aguas azules del Atlántico. El Norte es más húmedo, lo que proporciona un paisaje con vegetación más tropical y frondosa, y es aquí donde encontramos los más bellos parques naturales para los amantes del senderismo. Hay playas de arena negra salvajes de origen volcánico: El Bollullo en la costa de La Orotava, la playa de Benijo, la más hermosa de Anaga, la playa de Los Guíos, también conocida como la playa de Los Gigantes por sus acantilados del mismo nombre, la playa de Masca de arena negra totalmente salvaje, o la Playa Jardín, una de las mejores playas urbanas del Puerto de la Cruz.

El Norte de la isla tiene un ambiente más local y selecto. Existen varios pueblos con encanto que son perfectos para alojarse o por lo menos deberían ser visitados. Empecemos por Garachico, lugar tranquilo, con piscinas naturales para darse un baño y uno de los que mejor conservan su patrimonio histórico-artístico. Aquí tenemos varios hoteles que van desde lujo, B&B y casas rurales, todas con un encanto especial y carácter propio de la zona. El pequeño y bonito pueblo de Sauzal está muy cerca y tiene un casco central que se visita fácilmente, aunque aquí las calles son empinadas, que son parte de su atractivo, pero no apetecibles para los más vagos. Es perfecto disfrutar de un precioso atardecer desde algunas de sus terrazas y miradores. La pequeña ciudad de La Orotava domina en la parte más alta de su valle y está a los pies del Teide. Tiene un conjunto Histórico Artístico, repleto de palacetes y mansiones, principalmente de los siglos XVII y XVIII, que se reúnen alrededor de su casco antiguo. Icod de Los Vinos es otro de los pueblos situados en el norte de Tenerife, a mitad de camino entre La Orotava y Garachico. Es conocida por su producción de vino, especialmente el vino blanco hecho a partir de la variedad de uva Listán Blanco producida por pequeñas bodegas familiares.

San Cristóbal de La Laguna es una de las ciudades más grandes de Tenerife, declarada Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO en 1999 y es una visita obligada siempre, ya sea para pasear por las calles de esta población fundada en 1496, para salir de compras o simplemente para tapear o ir de copas, porque La Laguna está llena de pequeños bares y restaurantes.

Tegueste tiene una larga tradición agrícola y se encuentra junto a la cordillera de Anaga. Es un lugar pequeño con algunos ejemplos de arquitectura tradicional canaria que, en los últimos años, ha intentado posicionarse como destino enoturístico. El municipio también cuenta con numerosas rutas de senderismo y áreas naturales protegidas, como el Parque Natural de la Corona Forestal y el Paisaje Protegido de las Lagunetas, que ofrecen hermosas vistas de la isla y una oportunidad para conectarse con la naturaleza.

El Sur de Tenerife: tiene un clima más cálido y es mucho más seco. En general, es la zona más popular entre aquellos que buscan principalmente sol y playa. Si lo que buscas son buenas playas de arena blanca o dorada y buen tiempo garantizado durante todo el año, el sur es la mejor opción, aunque pierde la esencia de la isla con un turismo masificado como en las zonas de Playa de las Américas y Los Cristianos, donde se encuentra la mayor concentración de hoteles.

El municipio de Güímar, ubicado en el sureste de la isla, escapa a esta invasión. A poca distancia de la capital Santa Cruz de Tenerife, en su valle encontramos el Parque Natural de la Corona Forestal, el Paisaje Protegido de las Siete Lomas y el barranco de Herques catalogado como Monumento Natural. En esta zona encontramos hoteles rurales inmersos en plantaciones de plátanos, algunos de ellos justo frente al mar.

La capital de la isla, Santa Cruz de Tenerife: es muy bonita y está situada en la costa norte, siendo una buena opción que puede ofrecerte días de playa, visitas culturales y a parques naturales, compras y buena gastronomía. Hay playas tan buenas como la Playa de las Teresitas, de arena dorada y una de las más conocidas de la isla, o la Playa de las Gaviotas, de arena negra. No dejes de pasar por el Castillo de San Cristóbal y la Torre Costera Defensiva de San Juan Bautista, iglesias como la de la Concepción y la de San Francisco, museos como el de la Naturaleza y el de Bellas Artes, jardines botánicos como el Palmetum, por nombrar algunos.

Existen varios hoteles y apartamentos con encanto en Santa Cruz de Tenerife, pero para ayudarte mejor sería que nos pidieras consejo sobre dónde alojarte, ya que tenemos varios tipos de alojamientos, desde villas de lujo hasta pequeños apartamentos con vista al mar y hotelitos coquetos que no están en nuestra lista de alojamientos seleccionados con encanto.

Tenerife cuenta con una variedad de parques naturales que ofrecen experiencias únicas para los amantes de la naturaleza. El Parque Rural de Anaga es impresionante, con montañas cubiertas de bosques de laurisilva, creando un entorno mágico y misterioso con varios senderos disponibles. La Corona Forestal es un parque natural que rodea la isla y ofrece una rica diversidad de flora y fauna. El Parque Rural de Teno destaca por sus senderos en impresionantes acantilados y formaciones rocosas, ofreciendo paisajes escarpados de grab belleza. La Reserva Natural del Malpaís de Güímar ofrece paisajes volcánicos únicos y una biodiversidad singular.

El parque natural de Teide con su volcán activo con 3.718 metros de altura es el más impresionante de todos, con sensacionales vistas sobre la isla, es un lugar mágico para ver las estrellas de noche. Subirlo a pie es una proeza que no es para todos, ya que la escalada es dura. Sin embargo, existe un teleférico que permite ascender a la cumbre del volcán, salvando un gran desnivel que, de hacerse a pie, requeriría mucho tiempo y esfuerzo. Es importante tener en cuenta que la temperatura baja drásticamente, por lo que, aunque hace buen tiempo en el Parque Nacional de El Teide, hay que llevar ropa abrigada al llegar a la cima. Además, es necesario obtener un permiso, que forma parte de la protección de la administración del parque nacional, ya que solo se permiten un número limitado de visitantes al día.

Cada uno de estos parques brinda a los visitantes la oportunidad de conectarse con la belleza natural de Tenerife y disfrutar de actividades al aire libre en un entorno único.

La rica biodiversidad marina del mar de Tenerife, con aguas cristalinas es perfecta para el buceo y en la Costa Adeje y Las Galletas, lpuedes disfrutar de impresionantes arrecifes, así como la observación de tortugas marinas y peces tropicales. Los Cristianos ofrece inmersiones a lo largo de acantilados y formaciones rocosas, con la posibilidad de avistar rayas y mantas.

La cocina tradicional de Tenerife no se trata de técnicas elaboradas ni exhibiciones extravagantes. En cambio, se centra en procesos simples e ingredientes de origen local como pescado, papas, cerdo y quesos, con muchas similitudes con la cocina de Venezuela y otros países caribeños. El ingrediente clave en la comida tradicional de Tenerife, y de hecho en toda la cocina canaria, son las papas arrugadas, o papas arrugás. Otro plato básico es el Almogrote, una variación de los mojos de las Islas Canarias, en el que el queso de La Palma reemplaza ciertos ingredientes vegetales como los pimientos y el ajo. El Sancocho, un guiso hecho con pescado salado como cherne, chopa o lubina, papas dulces, aceite de oliva y perejil, se considera el más sabroso de los platos tradicionales de Tenerife. Todos estos platos reflejan el enfoque de la isla en ingredientes simples de origen local y son un testimonio de la rica herencia culinaria del archipiélago canario.

Los guachinches son una institución en Tenerife. Son tascas típicas en entornos rurales para aquellos que disfrutan de buena comida a un precio razonable y aprecian las cosas simples de la vida, como el ejemplo de "Los Gomez", con un ambiente familiar y ubicado literalmente en medio de viñedos. Originalmente, los guachinches eran pequeñas tascas creadas por los productores de vino para vender su producción de vino. Con el tiempo, se añadieron aperitivos al menú, dando origen a los guachinches actuales de Tenerife.

Tenerife tiene una larga historia de producción de vino, que se remonta al siglo XVI. El suelo volcánico y el clima único de la isla la convierten en un lugar ideal para cultivar uvas y Tenerife alberga varias regiones vinícolas diferentes. La más famosa de ellas es la región de Tacoronte-Acentejo, que produce vinos tintos y blancos de alta calidad elaborados a partir de las variedades de uva Listán Negro y Listán Blanco, respectivamente. Otras regiones vinícolas destacadas en la isla incluyen Ycoden-Daute-Isora, Abona y Valle de Güímar.