Madrid lo tiene todo: una escena cultural envidiable, una oferta gastronómica exquisita, un rico y variado patrimonio histórico, y una vida nocturna como ninguna capital europea. Disfruta de una ciudad llena de energía con la selección de hoteles boutique y hoteles con encanto en Madrid que te ofrecemos en Secretplaces. Perfectos para una escapada romántica, un viaje con amigos o en familia. Como dicen los madrileños: “de Madrid al cielo”. Ponlo a prueba con los mejores alojamientos cuidadosamente escogidos que ponemos a tu disposición para que disfrutes de una experiencia inolvidable en la capital española.

Madrid es una ciudad señorial, llena de obras de arte y maravillas arquitectónicas que ofrecer a sus visitantes. El Palacio Real por ejemplo, es un impresionante conjunto monumental de estilo barroco clasicista italiano, inaugurado por Carlos III en 1714. Aunque la Familia Real Española no habita aquí en la actualidad, se trata de la residencia oficial del rey así que por ello se utiliza para ceremonias de Estado y otros actos solemnes.

La Plaza Mayor, la plaza principal de la ciudad, es una impresionante plaza porticada que debe su configuración a la época renacentista – construida entre 1617 y 1619 – y se encuentra a pocos pasos de la Puerta del Sol, el auténtico centro de la ciudad. La Casa de los Lujanes, casa-palacio con fachada gótica – del siglo XV – y uno de los conjuntos arquitectónicos más antiguos de la capital. 

Y qué podemos decir de sus museos. En esta ciudad se concentran algunas de las mejores obras artísticas de la historia, (en el llamado Triángulo del Arte). El más importante de todos es el Museo del Prado, con una colección excepcional de los maestros europeos de los siglos XVI al XIX, y que incluye obras maestras de Velázquez, Goya o Rubens. En el Museo Thyssen-Bornemisza se exponen las obras adquiridas a lo largo de décadas por la familia del mismo nombre, desde el gótico del siglo XIV hasta el pop art de los años 80. Y por último el Museo Reina Sofía, de Arte Contemporáneo, ubicado en el edificio Sabatini en la zona de Atocha, en el que podemos disfrutar de obras de Dalí, Miró y por supuesto Picasso – cabe destacar el famoso “Guernica”, el cuadro más importante del museo.

La Casa Cisneros, por otra parte, es un palacio plateresco del siglo XVI, restaurado a principios del siglo XX, que alberga dependencias del Ayuntamiento. La Casa de la Panadería – siglo XVI-XVII – el edificio más llamativo de la impresionante Plaza Mayor, que destaca por las bellas pinturas murales de su fachada. Y el Banco de España, construido entre 1842 y 1891, es uno de los mejores edificios eclécticos de Madrid.

Y para el que busque un espacio verde en la ciudad, recomendamos visitar el Retiro, un gigantesco parque en pleno centro de Madrid que a su vez acoge numerosos conjuntos de gran interés arquitectónico o cultural, como el Monumento a Alfonso XII o el Palacio de Cristal, en el que cada cierto tiempo se celebran exposiciones de diferente naturaleza.

Definir la cocina madrileña auténtica no es fácil, pues Madrid es la capital Europea que más ha absorbido las cocinas regionales de su país. Los platos tradicionales suelen tener su base en recetas humildes y contundentes, pensadas para los trabajadores, pero a pesar de ello deliciosas.

Las recetas comúnmente aceptadas como típicas madrileñas son: el Cocido Madrileño – un estofado preparado a fuego lento con garbanzos y distintos tipos de carne, como chorizo o morcillo, y verdura, como la patata, zanahoria o nabo – que normalmente se sirve en varias tandas – primero la sopa, después la verdura y por último la carne. Aunque en realidad existen infinitas variaciones a la hora de preparar y degustar este plato tan típico.

Los callos a la madrileña – hechos de tripas de vacuno o cordero con chorizo, pimentón y otros ingredientes – tienen un aspecto poco apetecible y no es un plato apto para timoratos pero aquellos que se atrevan a probarlos descubrirán que están francamente deliciosos. También es muy típica la sopa de ajo – hecha de caldo, pan viejo o seco, aceite de oliva, mucho pimentón y por supuesto ajo.

Y, aunque resulte paradójico considerando su situación geográfica, cabe comentar que en su gastronomía abundan los pescados y mariscos, que se encuentran aquí en cantidad y calidad excepcional – no es coincidencia, ya que la ciudad posee el segundo mercado central de pescado del mundo, tras el de Tokio; entre sus recetas más tradicionales destacan el besugo al horno, el bacalao o los calamares a la romana – como en el famosos bocadillo de calamares.

Entre sus dulces destacan: las torrijas, los barquillos y los bartolillos con crema. En Madrid, así como en el resto de España, las tapas constituyen una antigua tradición gastronómica, por lo que encontrará numerosos establecimientos especializados para "ir de tapeo". Y nada más madrileño que acompañar una cena con su reciente Denominación de Origen: “Vinos de Madrid” – jóvenes, afrutados, y aromáticos, en sus versiones de tinto, rosado y blanco.