Provence Alpes Côte d'Azur: el Mediterráneo en su máxima expresión
Este territorio se divide en: Provenza, con sus campos de lavanda aromática, los Alpes con sus imponentes cumbres, Camargue con su biodiversidad única y la Riviera con sus atractivos puertos con restaurantes a orillas del mar, es una región multifacética y las más visitadas en Francia.
En esta extensa región encontramos ciudades bien conocidas como Marsella, Niza, Aix-en-Provence, Aviñón o Arlés. Centros culturales rebosantes de monumentos, desde grandes iglesias y museos hasta castillos y bulliciosas plazas, que invitan a los visitantes a sumergirse en su estilo de vida elegante, lleno de hoteles boutiques de lujo con una escena gastronómica refinada.
La Riviera Francesa, también denominada "Côte d'Azur", es una costa bañada por el mar Mediterráneo que supuestamente comienza en la ciudad de Hyères, ubicada al sureste de Marsella, y se extiende hasta Menton, cerca de la frontera con Italia. Este tramo incluye lugares emblemáticos como Niza, Cannes y Mónaco, y seduce con sus playas de arena dorada, calas secretas y aguas pacíficas. Es difícil encontrar alojamientos con encanto a pie de playa en la Riviera Francesa, pero existen varios pequeños hoteles o casas rurales en la Costa Azul a unos cuantos kilómetros del interior, que van desde el súper lujo hasta precios medio-altos. Es una zona cara, pero donde el precio y la calidad van de mano dada.
Provenza es donde te relajas, paseando por sus extensos campos de olivares, viñedos, lavandas, salpicados de aldeas donde la buena mesa siempre te acompaña, con un queso, una baguette y un buen vino de la región. La zona es tranquila y muy romántica con pequeños B&B en Provenza o maisons d’hôtes en el campo o en pequeños pueblos. También hay casas rurales para alquilar con una decoración que evoca la campiña francesa, con colores claros y muebles tradicionales rústicos con un estilo clásico elegante.
El Parque Natural Regional de la Camarga se encuentra cerca de la ciudad de Arlés y se extiende a lo largo de la desembocadura del río Ródano en el mar Mediterráneo. Aunque geográficamente asociada con Provenza, la Camarga tiene características naturales y culturales que la distinguen como una región única con un asombroso entorno natural: marismas salinas, dunas, lagunas y praderas con biodiversidad que incluye los icónicos caballos blancos de Camarga, toros y flamencos. La región es popular para la observación de aves y para disfrutar de la naturaleza. Puedes ver nuestra lista de alojamientos con encanto en Camarga.
En contraste, los Alpes de Alta Provenza y Alpes Marítimos ofrecen magníficos paisajes de montaña, con picos majestuosos, lagos de gran altitud, valles verdes y famosas estaciones de esquí. El Parque Natural Regional de Verdon, con sus deslumbrantes cañones, es un lugar precioso con senderos que ofrecen vistas panorámicas de las gargantas y el embalse de Sainte-Croix. Tenemos una selección de alojamientos con encanto en los Alpes.
Occitania - Languedoc - Rosellón y Mediodía Pirineos: el lado soleado de la vida
Occitania está arropada por el imponente telón de fondo de los Pirineos y de espaldas a España. Esta acariciada por las aguas del Mediterráneo, y comprende las antiguas regiones de Languedoc-Rosellón y Mediodía-Pirineos. Es un destino de gran diversidad paisajística y con muchas historias para contar. Sus habitantes dejan que el tiempo fluya como si fuera un riachuelo, con calma, pero con constancia, para disfrutar de la vida. Se enorgullecen de sus productos de excelente calidad gastronómica, que incluye el famoso foie gras, el queso Roquefort y el conocido plato cassoulet.
Languedoc-Rosellón, está justo en el corazón del sur de Francia, y rebosa de belleza. Enclavada entre los Pirineos, el Ródano y las Cévennes, emerge como un anfiteatro con el mar como su escenario, bañado en un generoso sol. Alberga las impresionantes Gargantas del Tarn en Lozère, donde dramáticos acantilados de caliza, ríos cristalinos y bosques verdes convergen. En Gard está La Camarga, un paisaje encantador de marismas, lagunas, dunas y playas, poblado de una muy especial y protegida flora y fauna. Cap d'Agde, por otro lado, atrae con sus playas de arena y calas aisladas. Además, Languedoc-Rosellón ostenta el título de la región vitivinícola más grande de Francia, invitando a los conocedores a emprender un viaje sensorial a través de sus variadas cosechas locales. No hay mejor lugar para descubrir esta región que en uno de nuestro alojamiento con encantado, hoteles rurales y B&B en Languedoc-Rosellón, que van desde hoteles boutique en pueblos históricos en Occitania como Montpellier, Carcasona o Arlés hasta románticas casas rurales en la campiña.
Nueva Aquitania - Aquitania, Poitou-Charentes y Limosín: entre viñedos y el océano
Esta luminosa costa atlántica con gran extensión del bosque de pino piñonero, los imponentes Pirineos y el tranquilo valle del Dordoña, Aquitania emerge como una zona donde se come bien, se bebe bien y se vive bien. La región es famosa por su vino de Burdeos tan característico, y sus gentes bastante tradicionales, que se enorgullecen tanto de su tierra que se denominan primero como "bordelés" antes que francés. Hay también playas preciosas bañadas por las aguas atlánticas, como Arcachon, Île de Ré o la bien conocida ciudad de Biarritz.
El Périgord hace parte ahora de la Nueva Aquitania y es conocido por su rica tradición culinaria, que incluye especialidades como foie gras, trufas, setas y platos a base de pato. Además, la región cuenta con una abundancia de castillos.
Córcega: la auténtica isla
Este reino es fue la cuna de Napoleón, donde las montañas acarician el cielo. Córcega tiene todo para ser un paraíso, pero es, sobre todo, una isla de profundos contrastes, donde las tradiciones milenarias se entrelazan con una naturaleza cruda e indómita. Su historia tumultuosa ha moldeado indeleblemente el espíritu corso. Montañosa y agreste, con carreteras estrechas y un pronunciado declive, salpicada de pueblos encaramados y vistas que te quitarán el aliento en cada giro. Este paisaje y la historia de la isla definen el carácter corso: son directos, algo rudos y de pocas palabras con quienes visitan la isla; se necesita habilidad para que te brinden una sonrisa, pero si logras entrar en sus corazones, el panorama cambia y se transforman en personas de una gentileza extrema. Te invitamos a conocer la isla alojándote en las mejores zonas, desde pequeños hoteles de montaña hasta lujosos 5 estrellas en la costa en Córcega.