Córcega se encuentra a tan sólo 12 kilómetros de Cerdeña y a 200 kilómetros de la bella Costa Azul. Es uno de los principales destinos turísticos de Francia. No obstante, y a pesar de la gran afluencia de viajeros que recibe anualmente, se trata de uno de los parajes naturales mejor conservados del mediterráneo.
La isla cuenta con una gran variedad de paisajes: altas cumbres, pintorescos pueblos y ciudades, preciosas playas de arena blanca y claras aguas turquesas, bellas campiñas y misteriosos bosques. Todo ello hace de la isla el destino perfecto, sean cuales sean los motivos de tu viaje.
La región norte de Córcega es la menos turística y más natural. Cuenta con los preciosos pueblos de Bastia, Vallecall, Rogliano, Centuri y Calvi. Todos ellos llenos de encanto y belleza.
El sur es más transitado. Aquí encontramos ciudades como Bonifacio, la más meridional de las urbes de la isla y también la más concurrida por su increíble belleza. El Cementerio Marino es uno de los principales atractivos de la región sur, así como las islas Lavezzi, una reserva natural. También en esta área está Ajaccio, una villa portuaria conocida por ser el lugar de nacimiento de Napoleón Bonaparte. Y entre Ajaccio y Calvi, siguiendo la costa oeste de Córdega, en el Golfo de Porto, se encuentran las espectaculares Calanques de Piana, declaradas Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Calvi es otra ciudad que no te puedes perder, por la riqueza de su patrimonio, su puerto y sus espectaculares playas
Bastia es el perfecto ejemplo entre lo moderno y lo clásico. La capital económica de esta isla es una ciudad antigua llena de encanto, que destaca por la arquitectura genovesa de sus edificios, su precioso puerto y las iglesias barrocas. Además, cerca de Bastia está el Cap Corse, uno de los puntos de obligada visita.
En el este encontramos un relieve más suave y los municipios de Erbalunga, Luri, Macinaggio, Rogliano y Barcaggio. En el lado oeste, más salvaje y espectacular, cuenta con numerosos pueblos situados en el borde de imponentes acantilados como Centuri, Nonza y Saint Florent.
Córcega es también una con un rico patrimonio cultural e histórico marcado por las diferentes civilizaciones que la poblaron. La isla está llena de vestigios de su pasado: ruinas prehistóricas (como los menhires de Filitosa o los Castelli de l’Alta Rocca); la ciudad antigua de Aléria con sus murallas griegas y su necrópolis prerromana; o las ciudadelas y los bastiones que pueblan toda la isla.