Quinta de Santana

Casa Marreco ha sido construida recientemente en el estilo tradicional de la zona. Se encuentra dominando un valle al final de una gran Quinta (finca) y presume de unas vistas inigualables sobre una preciosa campiña virginal, con viñedos, perales y bosques de eucaliptos.
Un avenida particular nos conduce a la casa, atravesando un viejo portón y unos olivares. La casa, el jardín y la piscina han sido creados pensando en todos los detalles – y se nota. El edificio ha sido encalado con un ocre suave que combina bien con el área circundante. Unas escaleras de piedra en la parte posterior descienden desde un césped vallado hacia una amplia piscina en la que el agua rebosa, ópticamente, sobre el valle. En el interior hallamos una gran chimenea de una sola pieza de mármol rosa. Originalmente estaba previsto que fuera un estudio de arte, por lo que esta sala de estar tiene una vista espectacular sobre el valle. Desde las habitaciones, amplios ventanales nos llevan a una terraza de suelo con arabescos, desde donde podemos oír las cigarras cantar por la noche. La cocina está equipada con todo lo necesario para preparar unos buenos platos, incluso durante las vacaciones. Toda la casa está amueblada buscando la comodidad del visitante, y todas tiene una cocina moderna con todo lo necesario para cocinar.