Hotel La Malvasía

El hotel con encanto La Malvasía, en la aldea andaluza de El Rocío, está situado en el límite del Parque Natural de Doñana y proporciona paz y tranquilidad mientras las playas están al alcance de la mano. Contemplar la puesta de sol desde la piscina exterior o disfrutar de su habitación de hotel de estilo rústico con vistas a la imponente naturaleza le dejará de buen ánimo..

La Malvasia se encuentra en un antiguo edificio encalado con mucho ambiente. Las modernas y encantadoras habitaciones son muy acogedoras y cuentan con un balcón de ensueño, con vistas a la marisma principal del Parque Natural de Doñana. Todas están equipadas con aire acondicionado. Las camas son muy cómodas y con una ventana abierta se puede dormir con el hipnotizante sonido del agua.

 El restaurante "LaBoca", en La Malvasía, es una visita obligada durante su estancia en el hotel, para almorzar, cenar o simplemente ir de tapas.

Cada comida es creada con sabores eclécticos y revolucionarios por el Chef, que se presenta con una cocina de estilo moderno y minimalista. No olvide complementar su comida con un vino de la región. El desayuno es estupendo y puede servirse si desea en la terraza con unas vistas fabulosas.

Ya empieza a sonar apetecible? ¡Pues hay más! El Rocío también lleva a cabo antiguas tradiciones que tienen su origen en el siglo XIII. Hay una historia local de un cazador que vio a la Virgen María en el tronco de un árbol. Allí se encuentra ahora el famoso "Santuario de Nuestra Señora del Rocío". El santuario es el centro de la Romería del Rocío que tiene lugar cada año durante Pentecostés. Este evento está lleno de alegría, baile y sevillanas rocieras.

Sin embargo, si prefiere venir a admirar la naturaleza, la increíblemente rica biodiversidad local, que incluye el raramente visto lince español y la colorida migración de más de 270 especies de aves (¿y se preguntaba dónde entraría la ornitología?) es todo lo que necesita, ¡y la lista de actividades puede ser incluso más larga!

 En La Malvasía también puede beneficiarse de otros servicios, como paseos a caballo por los caminos de arena, excursiones en 4x4, o incluso un día entero a la manera rociera con caballos, música en directo y una excelente cocina regional.

 Aunque hay que caminar un poco entre los sitios, el pueblo es pequeño y se puede recorrer en pocos minutos. La playa está a solo 10 km