Castel Fragsburg

Acariciado por incontables horas de sol, el hotel se encuentra en una colina privada y se encuentra enclavado en el jardín del hotel de 5 hectáreas justo debajo del castillo. Es un refugio rodeado por la esplendorosa naturaleza virgen. Un lugar que combina la comodidad alpina y la sensualidad mediterránea. Te inspirará a mirar lo convencional con ojos distintos y descubrir nuevos caminos. Un hotel castillo que no solo se destaca por su estilo, sino que también vive su filosofía: la filosofía del arte fino de vivir.

Este oasis de lujo se encuentra directamente debajo de su propio castillo medieval, al que solo pueden acceder los huéspedes del hotel.

Déjate consentir por el spa Castellum Natura. Los tratamientos de bienestar y los productos de cuidado recién preparados creados especialmente para el concepto de bienestar alquímico, el primero de su tipo, se basan en el conocimiento tradicional de hierbas y la naturaleza del Tirol del Sur, que tiene siglos de antigüedad.

También te espera un viaje culinario de ensueño en este hotel, a través de la cocina Fragsburg en el restaurante gourmet con estrella Michelin Prezioso y el restaurante Orangerie. El nombre Fragsburg Soul Garden revela lo que promete su cosecha. Hierbas frescas, frutas y verduras no solo nutren el cuerpo, sino que también inspiran el espíritu. Los ingredientes seleccionados a mano son la base de los productos de spa y de la cocina de Fragsburg. Las delicias epicúreas regionales y de temporada se elevan a momentos de felicidad galardonados para verdaderos conocedores que disfrutan con todos sus sentidos y con el corazón. El chef Egon Heiss crea verdadera poesía para el paladar con una cocina gourmet saludable. Las preferencias vegetarianas y veganas, por supuesto, no se pasan por alto. Disfruta del impresionante panorama de montaña en la terraza con una copa de vino.

Una estancia en el Castel Fragsburg te inspirará a tomarte la vida con ligereza y disfrutar del arte fino de vivir sin distracciones: ya sea durante una caminata en las cercanas Dolomitas o paseando por el casco histórico de Merano, que está a solo 15 minutos. Ya sea durante un ritual de incienso o una tarde relajante en el jardín encantado del castillo junto a la piscina climatizada al aire libre; aquí cada quien puede vivir a su propio ritmo. Tu querida mascota también es bienvenida para compartir contigo esta experiencia y posiblemente completarla.