En el norte del país, en verano, nunca oscurece y es en esta época cuando los suecos celebran Midsommar. Se visten con trajes tradicionales y bailan sujetando sus cintas alrededor del mayo, mientras escuchan música folclórica, caracterizada por los sonidos vívidos y claros del violín, las gaitas y cantos típicos de la fiesta. La capital de Suecia es Estocolmo, una ciudad inmersa en el diálogo entre tradición y modernidad. Se extiende por 14 islas y está dominada por una arquitectura tradicional y una atmósfera dinámica y progresista. Aún hoy, Suecia está asociada a la melancolía envuelta de secretos propia de la mitología nórdica y la cultura vikinga, por sus muchas historias y cuentos de tiempos antiguos, mágicos, en los que los dioses eran reales y la naturaleza salvaje. Quizá por esta herencia, quizá por las vivaces y coloridas nuevas ideas y estilos que han ido calando en el alma de sus habitantes, Suecia es hoy en día un país de espíritu y carácter únicos.