La Casa del Califa

Si siempre ha tenido curiosidad por sentir como hubiese sido vivir en la época dorada árabe no deje de visitar Vejer, y no dude en alojarse en la Casa del Califa. Vejer es uno de los “pueblos blancos árabes” mejor conservados: más de 500 años de tradición islámica han dejado una huella permanente en la cultura, la arquitectura y el paisaje de la zona. En una de las plazas más antiguas de este pueblecito queda situada La Casa del Califa: hotel compuesto por pasillos que forman laberintos y escaleras que nos dan acceso a diferentes partes del hotel. Las habitaciones, situadas en diferentes pisos, dan a tres atrios tradicionales proporcionando luz y profundidad a la estructura. Algunas de las habitaciones están situadas fuera del edificio principal -edificio recientemente adquirido por el hotel-, añadiendo un sentimiento aún más laberíntico. Muchas de las habitaciones tienen alfombras árabes; todas las barandillas y piezas de hierro forjado han sido realizadas para la Casa del Califa en Marrakech, mientras que el mobiliario y la decoración incluyen arcas persas del siglo XVIII, tapetes afganos, lámparas libanesas y cobre yemení. La mayoría del arte que decora las paredes es original, inspirado en motivos y temas de la España islámica, incluyendo trabajos de pintores argelinos, marroquíes y granadinos. Una cuestión a tener en cuenta: la multitud de diferentes niveles y escaleras no lo hacen apropiado para personas mayores o con discapacidad. Una vez hecha esta salvaguarda, el hotel posee un excelente valor impregnado de una mística atmósfera.